Ciudad de México. Diciembre 2.- Funcionarios del nuevo gobierno mexicano informaron que este lunes a las 11:00 horas, comenzará a operarse el compromiso número 63 de la gestión del presidente André Manuel López Obrador, que consiste en poner a la venta la flotilla de naves aéreas propiedad del gobierno que no son prioritarias para el funcionamiento del país.
La primera aeronave de la flotilla a ponerse en venta es el avión presidencial “José María Morelos y Pavón”, que será trasladado a un hangar de San Bernardino, California; donde estará resguardado hasta hallarle nuevo dueño.
En su discurso pronunciado en el Zócalo de la capital del país, justo después de su protesta como presidente de México, López Obrador resaltó que “está en venta el avión presidencial y toda la flotilla de aviones y helicópteros que eran utilizados para el traslado de altos funcionarios públicos”.
En un mensaje a los medios de comunicación, Jorge Mendoza, director del Banco Nacional de Obras y Servicios Públicos (Banobras), detalló que la aeronave -adquirida en noviembre de 2012 por el entonces presidente Felipe Calderón Hinojosa- saldrá definitivamente de México y que se dará un “mejor uso” al hangar que lo albergó.
De acuerdo con Mendoza, la Secretaría de Hacienda se encuentra en comunicación con la Oficina de las Naciones Unidas de Servicios para Proyectos, una oficina de la ONU para facilitar la gestión de proyectos, adquisiciones e infraestructura en diversos países, “para dar certeza y garantizar al pueblo mexicano completa transparencia en este proceso”.
Este lunes, el avión Boeing 787-8 partirá del Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México “Benito Juárez”, rumbo al centro aeroportuario de San Bernardino, California, que fue identificado por la empresa fabricante “como el lugar para preservar la aeronave, pues está habilitado para dar servicio y mantenimiento”.
El avión será trasladado y custodiado por tripulación de la Fuerza Aérea Mexicana, y el mantenimiento estará bajo la responsabilidad de mecánicos de la misma dependencia, quienes darán servicio a la aeronave de acuerdo con las indicaciones de sus manuales.
“Demostramos con hechos que la austeridad del gobierno federal es prioritaria en esta administración, con acciones para la enajenación de la aeronave, garantizando las mejores condiciones en el proceso de venta y el uso eficiente de los recursos públicos”, dijo.
El último viaje del avión presidencial fue el que hizo el expresidente Peña Nieto desde la Cumbre del G20 en Argentina.
El Boeing 787-8 “José María Morelos y Pavón” cuenta con una capacidad máxima de 80 pasajeros, fue utilizado por dos años seis meses para realizar 214 operaciones durante la administración de Enrique Peña Nieto. Recorrió una distancia superior a los 600 mil kilómetros.
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