Madrid.- El mexicano Adrián Hong Chang, quien supuestamente atacó a Norcorea ha estado ligado a diversas organizaciones a favor del cambio de régimen en Pyongyang.
Hong Chang, que supuestamente estuvo al frente de un asalto a la embajada norcoreana en Madrid, se hacía llamar «Matthew Chao» mientras estaba en Madrid, esto según la Audiencia Nacional española. En Estados Unidos es conocido como Adrián Hong. Tras el ataque, supuestamente huyó a Nueva York y no sabe nada de él desde entonces.
La representación diplomática norcoreana fue atacada el 22 de febrero por un comando, unos días antes de la segunda cumbre, en Hanói, entre el presidente estadounidense, Donald Trump, y el líder norcoreano, Kim Jong Un.
Tras varias semanas de total mutismo, un juez de instrucción español desveló el martes los detalles sobre este asalto y sobre el grupo que lo perpetró, del que varios miembros son objeto de una orden de detención internacional.
El grupo de Defensa Civil Cheollima (DCC) reivindicó este asalto y dijo que quería dar a conocer las actividades «ilegales» de los representantes diplomáticos de Pyongyang en el extranjero.
Bien educado, con conocimiento detallado de la política y economía norcoreana, Hong co-fundó en 2005 el Liberty in North Korea group (LiNK), con sede en California, que ayuda a reubicar a refugiados norcoreanos.
En diciembre de 2006 fue arrestado junto a otras dos personas en China cuando intentaban ayudar a seis norcoreanos a huir de su país. Todos fueron liberados después de 10 días.
Poco después de eso Hong dejó LiNK y comenzó a hacer campaña por los derechos humanos y por un cambio de gobierno en Corea del Norte, y se presentaba como director ejecutivo de una consultora llamada Pegasus Strategies LLC.
En un artículo sobre Hong, la compañía era descrita como «una iniciativa que utiliza tecnología de vanguardia para penetrar en sociedades cerradas y dar poder a la gente en esas naciones».
El currículum que presentó cuando era profesor en la organización TED en 2010 decía que había dado clases sobre derechos humanos y política exterior en la Universidad Ewha de Corea del Sur y que era investigador en la Universidad de Yale.
Pero luego sus actividades se volvieron turbias. Pocos dentro del estrecho círculo de observadores sobre Corea del Norte en Washington, decían saber de él o de quién financiaba sus actividades.
En 2011 apareció en Trípoli, Libia.
Un ex compañero de Hong en TED, el empresario jordano Suleiman Bakhit, dijo que durante la primera guerra civil libia montaron una misión para llevar a 15 mil civiles libios a Jordania para ser atendidos en hospitales en ese país.
Hong siguió trabajando por Corea del Norte. «Considero que la primavera árabe es un ensayo general para Corea del Norte», dijo al diario The National de Abu Dhabi en 2011.
Pero Corea del Norte es un opositor del pueblo mucho más letal, más preparado y más grande que Siria, Libia, Egipto, Túnez o Yemen, en todas las categorías: la omnipresencia de la seguridad pública y la policía secreta, el tamaño y la movilización del Ejército, la desesperanza y el estado general empobrecido y desnutrido de la población». Adrian Hong Chang
En 2015 fundó el Instituto Joseon, con sede en Nueva York y cuyo nombre remite a una dinastía del siglo 14 a 19 que reinó en la península coreana.
En su página web describe su misión como «preparar proyectos factibles sobre cómo manejar una transición y prepararse para un futuro mejor en Corea del Norte» y sugiere que tiene «comisiones de planeamiento» secretas para dirigir el país.
No está claro cuál es el vínculo de Hong con el grupo denominado Defensa Civil de Cheollima (DCC) que se adjudicó el ataque a la embajada en Madrid y que aparentemente ofreció el material que consiguió allí al FBI. (Agencias)
reynaldo@elmejor.com.mx