Chihuahua, Chih., a 21 de noviembre del 2018. Luego de que el presidente electo, Andrés Manuel López Obrador anunciara la creación de la Guardia Nacional con la finalidad principal de combatir en todo México al crimen organizado, el gobernador de Chihuahua, Javier Corral Jurado, dio que ello representaría la institucionalización de las fuerzas armadas en tareas de seguridad pública.

Al respecto, el mandatario estatal refirió que prefiere la colaboración de la Policía Federal en dichas tareas y pese al notorio fracaso de dicha corporación en el combate al crimen organizado en los sexenios presidenciales de los panistas Vicente Fox Quezada y Felipe Calderón Hinojosa, así como el del priísta Enrique Peña Nieto, dijo que “en Chihuahua no nos vamos supeditar a un mando militar”

“Chihuahua no se va a someter a ningún mando militar”, sentenció.

El gobernador Corral Jurado sostuvo lo anterior pese a que en los dos años de su gestión no le ha ido del todo bien en el renglón de seguridad pública, pues la Policía Estatal a fracasado rotundamente en la misión de desterrar de Chihuahua a las distintas bandas del crimen organizado; tanto en las zonas urbanas como en la rurales, especialmente en las serranas.

En las últimas 48 horas, en Ciudad Juárez y Chihuahua grupos de criminales armados han atacado instalaciones y patrullas de la Policía Estatal, mientras que en Gómez Farías asesinaros al menos a dos personas y una más en la zona sur de la capital del Estado.

El 28 de octubre pasado un extranjero fue asesinado en la cabecera municipal de Urique en presencia de pobladores y policías del lugar y según el mismo gobernador reveló, el turista fue asesinado por el grupo criminal conocido como  Los Salazar; el mismo que a principios del 2017asesinara a la periodista Miroslava Breach Velducea.

En entrevista de banqueta y a pregunta de una reportera, Corral Jurado estimó que “no son los policías ni sus mandos los que han fallado o escatimado esfuerzos en materia de colaboración, sino el mismo régimen corrupto que ha ejercido presión política sobre los cuerpos de seguridad”.

Dijo que el presidente electo ya conoce la postura del gobierno de Chihuahua y que aun cuando no ha recibido alguna respuesta, espera comentar el tema con algunos gobernadores ante la existencia de muchas dudas, especialmente por la por la posible violación a la soberanía de las entidades federativas, el atropello a las autoridades locales y el abandono a los proyectos de fortalecimiento para policías municipales y estatales.

Insistió en la presencia en las entidades de la Policía Federal, corrigiendo las deficiencias a través de una depuración, “pero no por ello dejar de reconocer su eficacia en el combate al crimen organizado”.

Al final lanzó la advertencia al nuevo gobierno de que si una Guardia Nacional va a tomar el mando de las entidades federativas, se corre el riesgo de que las fuerzas castrenses dejen de ser un apoyo para los gobierno estatales y la misma federación en materia de seguridad pública.