Ciudad de México. 3 de mayo.- La Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) dejará de captar 41 mil 947 millones de pesos (mdp) en 2021, por reducir la tasa del impuesto IEPS a las gasolinas y el diésel, tras el objetivo de amortizar los incrementos en sus precios al público.
A cada litro de gasolina Magna en México se le cobra una cuota de 5.11 pesos de Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS), de 4.31 pesos para la Premium, y de 5.66 pesos para el diésel. Pero existen precios finales máximos promedio a nivel nacional para estos combustibles establecidos por Hacienda, para que no se superen y no se vean saltos abruptos en el alza de los combustibles. Entonces, se reduce la cuota IEPS, lo que significa una menor recaudación para el fisco.
“A partir del mes de febrero se han otorgado estímulos para impedir que los precios de los combustibles se incrementen por encima de la inflación, los estímulos otorgados ascendieron en el primer trimestre a un mil 36 mdp”, detalló Karina Ramírez Arraz, titular de la Unidad de Egresos no Tributarios de la SHCP.
Hacienda pública todos los viernes en el Diario Oficial de la Federación (DOF) el valor de las cuotas del IEPS que aplicarán en la siguiente semana.
Cuando suben los precios de los combustibles a nivel global, Hacienda baja la tasa, y cuando bajan, la dependencia sube el IEPS, por lo que los precios finales se mantienen estables en vez de fluir con el libre mercado, explicó Ramses Pech, analista en materia energética y socio de Caraiva y Asociados-León & Pech Architects.
El año 2020 fue un año con bajos precios del petróleo por la baja demanda de combustibles a causa de la pandemia. En 2021, con la recuperación y reapertura económicas, el crudo está aumentando su precio a nivel global, lo que por efecto ha llevado al alza el precio de las gasolinas.
“Para el resto del año se esperan incrementos en los precios del crudo y en los combustibles explicado principalmente por la expectativa de recuperación de la demanda, derivado del incremento de la movilidad por las campañas de vacunación contra el COVID, esto podría generar mayores estímulos que para el cierre del año se estima en 41 mil 947 mdp”, explicó Ramírez Arraz.
El monto estimado del costo fiscal es equivalente al presupuesto de dos año de la secretaría de Hacienda y es cuatro veces mayor al presupuesto del programa Jóvenes Construyendo el Futuro, y se une a una serie de factores que ponen presión al presupuesto público: como las ayudas financieras a Pemex, cero remanentes de Banxico y menores ingresos en los fondos de emergencia financiera.
De estas presiones, los estímulos al IEPS representan el menor, y es un factor que ya tiene considerado Hacienda.
“La diferencia de cómo el gobierno está haciendo sus cálculos en relación al pasado, es que está buscando ser más preciso de dónde puede encontrar mejoras de ingresos, y donde puede recortar”, explicó Ariane Ortiz-Bollin, analista de Moody’s en conferencia de prensa el pasado viernes.
Explicó que aunque los precios del petróleo y la producción petrolera se estén estabilizando en el corto plazo, a futuro, por la caída de los precios del petróleo y la caída constante de la producción, la aportación neta de Pemex a las arcas fiscales va a ser cero.
Esto es porque el gobierno va a estar aportándole alrededor de un punto del PIB y Pemex le va a estar generando ahora un punto del PIB, ya no los dos que le daba antes, explicó la analista.
En tanto, Hacienda considera que algunas presiones, incluyendo los menores ingresos por el IEPS, serán compensados por un mayor precio del petróleo que se tendrá en el año.
“Estamos viendo ahora 52 dólares por barril de petróleo. Nosotros utilizamos 42 dólares en el presupuesto, estamos ganando, vamos a tener una ganancia por el incremento en el precio del petróleo. Esto, a su vez, se va a reflejar en los costos que se incorporan en el precio de la gasolina”, explicó Gabriel Yorio, subsecretario de Hacienda.
Aseveró que los precios de la gasolina se han incrementado aceleradamente, “pero lo vamos a estabilizar en el precio objetivo que les mencioné, esa es la línea de política y ahí es donde se va manteniendo un incremento que está siendo ajustado sólo por inflación”.
Desde 2018 se establecieron precios objetivos o máximos para los combustibles, el precio promedio general (en todo el país) para este año no debe rebasar los 20.50 pesos para la Magna; entre los 21.50 y 22 pesos por litro la Pemium y el diésel entre 21.50 y 21.80 pesos, explicó Pech.(Onexpo)
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